<< ¿Qué tienen de buenos?!? >>

Uno casi siempre se pregunta el porqué de algunos inventos. He aquí, por ejemplo, el papel glasee, las mangueras "retorcibles" que venden por la tele o el mismo Aquaman. Pero peor aun son los que están mal hechos, porque intentan ser algo pero en su composición hay algo que rompe las bolas. Todo esto hago simplemente para referirme al día domingo. ¡Pero que asquerosidad de dia, que inmundicia! Alguna vez alguién disfruto un domingo? Pues no les creo, es imposible, tanto como ver un siberiano, porque todo el mundo sabe que los siberianos no existen (y si existieran, serían incognoscibles, y si fueran cognoscibles vivirían en Siberia y no en Argentina). Este día, sin dudas, es el peor de todos y la mejor prueba para demostrar que Dios también se equivoca, o ¿quién sabe?, tal vez su mujer lo forzó a crearlo para que se lo dedique a cortar el pasto y a cumplir otras responsabilidades hogareñas. No sé si leyeron alguna vez "El diario de Adán y Eva" de Mark Twain. En él se ve como Adán odiaba los domingos, y como para no hacerlo, son repulsivos.
Para entenderme mejor, detallaré paso a paso lo que transforman al domingo en un día de porquería:

1- El problema de tener que retomar las responsabilidades al dia siguiente. A mucha gente le molesta esto. La mayoria se deprime, estalla en llantos inconsolados y hasta se quitan la vida (que dentro de poco será más barato que tomar el colectivo) A mí no me molesta tanto. La vida se vive todos los días, menos los domingos, por supuesto.
2- Su carácter de feriado. O nunca les a pasado de tener que comprar algo y decir: "¡Uy! cierto que es domingo y está cerrado". Todo, absolutamente todo funciona para la mierda un domingo, más aun todavía si encima es feriado.
3- La desaparición de la gente. Todos los domingos, extraterrestres, que estaban disfrazados de barrenderos municipales y basureros, se quitan la careta y empiezan con un rapto masivo. No hay otra explicación, sino ¿dónde va la gente los domingos? ¡Es terrible! todo parece un gigantesco desierto, nadie contesta los teléfonos y uno se deprime demasiado y no le queda más que aguantar la soledad por ese día.
4- Bancarse a la familia. Y si hay algo que queda en el mundo es la familia. Todo los familiares aparecen los domingos. El tío borracho, el abuelo borracho, y los imbancables familiares infantes ( borrachos, por supuesto). Claro, seguramente Dios no tiene familia. Ya veo por qué creo el domingo.
5- La fiaca. Dormir hasta tarde, soportar la resaca del día anterior y otros factores podrían ser hipotéticas causas de este fenómeno. Sin embargo, no es así. Por más que no habeis sufrido estos males, querido hermano, estas condenado a estar todo el día como un zombi pajero incapaz de hacer algo útil. A no sentirse mal, no es culpa de uno, es el efecto de la función domingo. No podemos escapar de ella, es demasiado fuerte. Uno quiere hacer algo, cualquier cosa para romper esta cadena, pero no lo logra, uno no tiene ganas de nada. Que más da, no hagas nada, porque por más que lo intentes no podrás hacerlo, y si lo haces, parecerá un castigo, será un castigo.